El Hombre Nuevo del Castrocomunismo 26 de abril/10
Acabo de ver en televisión unas imágenes del acto de repudio ayer contra seis Damas de Blanco en las afueras de la Iglesia de Santa Rita en Miramar en La Habana. En una de las imágenes sale un hombre cuarentón o cincuenton, gordo, con una camiseta de esas con los brazos al descubierto que aquí en Estados Unidos les dicen “wife beaters.” El sujeto agita un brazo flácido y abriendo mucho la boca para que se vean bien sus pocos dientes podridos grita que las Damas de Blanco son “Unas 'descarás' que se venden por cuatro pesos de 'miehdda' y hasta dan el culo.” Y yo pienso que este es el famoso “Hombre Nuevo” de la Revolución. Un chusma, con la boca podrida y el alma más podrida aún, que forma parte de una turba organizada por el gobierno para hostigar a seis mujeres indefensas que, según la prensa, estuvieron más de siete horas soportando la gritería y los empujones de gentuza como ese cerdo inmundo y cobarde.
El castrocomunismo lleva ya más de 51 años en el poder. No sé cuanto más durará. Pero aunque dure mil años más, nadie le quita de encima que ha sido un fracaso. Y que el “Hombre Nuevo” que tanto prometieron es una porquería de ser humano como ese tipejo asqueroso, chusma, cobarde, con los dientes podridos que salió en cámara gritando malas palabras a unas pobres mujeres indefensas. Ese sujeto es el rostro y la voz del castrocomunismo. Que bueno que la imagen esté dando la vuelta al mundo.
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