La huelga de hambre y sed de Guillermo Fariñas, 14 de abril/10

¿Cuanto tiempo puede sobrevivir Guillermo Fariñas? No soy médico. No he consultado con ningún médico antes de escribir esto. Pero me parece que una persona que no ingiere alimentos sólidos ni agua, pero que está recibiendo sueros y líquidos en un hospital puede sobrevivir más tiempo que si no estuviera recibiendo esa asistencia médica.

¿Es legítima entonces la huelga de hambre y sed de Fariñas? Yo pienso que sí. Es obvio que, por mucho que dice lo contrario, el régimen castrista teme que muera Fariñas y está haciendo todo lo posible por evitar o al menos demorar su muerte. Mientras tanto, Fariñas se ha convertido en una importante voz, en un símbolo de la oposición la dictadura. El régimen no puede evitar que Fariñas sea entrevistado por los medios internacionales, que lo hacen con frecuencia. Fariñas, por su inteligencia, su valor y su imaginación, ya le ha propinado una enorme derrota a la dictadura. No pueden dejar que muera. Si muere, tienen que demostrar que hicieron todo lo posible por mantenerlo vivo. Pero a la vez no pueden callarlo. Pueden censurarlo y vilipendiarlo dentro de Cuba sin darle el derecho a respuesta. Pero ya no pueden evitar que Fariñas hable al mundo.

Y lo bien que habla Fariñas. Su mensaje es claro. Contundente.

Yo siempre he pensado que el liderazgo en una lucha contra una dictadura pertenece a la gente preparada, culta, con facilidad de expresión y con la fortaleza testicular para ser consecuente con lo que se dice. Así fueron los próceres de las Guerras de Independencia de Cuba. Así ha sido mucha de la gente que se ha enfrentado a los opresores del pueblo cubano en todas las etapas de la historia, incluyendo los nefastos 51 años de dictadura castrocomunista. Así es Fariñas.

Yo me opongo, por principios éticos, a las huelgas de hambre. Pero admiro a Pedro Luis Boitel, a Orlando Zapata Tamayo y a Fariñas.