MATARON A UN POLICIA. NO ENTIENDO BIEN LA NOTICIA

Ayer hubo una tragedia en el Condado Broward, que está al norte de Miami. Un policía que transportaba un reo a un tribunal fue asesinado. El prisionero logró arrebatarle el arma al policía, lo mató a tiros y se dio a la fuga. Afortunadamente, fue capturado esa misma tarde. Esa es una descripción amplia de lo ocurrido. Pero pongan atención ahora a los detalles.

Resulta que el policía tenía 76 años. El reo tiene 40 y es un tipo fuerte y musculoso. Está siendo juzgado por un asalto a mano armada. Pero ya cumple cadena perpetúa por múltiples asaltos a mano armada. Tiene un larguísimo historial de delitos de violencia, prácticamente desde que era un niño.

El anciano policía iba solo en el vehículo en que transportaba al prisionero. Y hoy hay declaraciones del jefe policial de Broward al efecto de que no se ha podido determinar si el prisionero estaba esposado mientras era transportado. Se ha dado a conocer también que la víctima del asesinato llevaba 20 años en la Policía de Broward. O sea, ingresó a la edad de 56 años, después de jubilarse de cartero.

Yo llevo un montón de años como periodista y muchos más como miembro de mi especie y habitante de este  planeta. Uno aprende y ve cosas nuevas todos los días. Pero yo jamás había visto algo como esto. Me perdonan el vocabulario. No encuentro otras palabras para decir esto: No entiendo un carajo.

Yo no sabía que existían policías de 76 años, mucho menos en Estados Unidos. Yo no sabía que una persona puede ingresar en un departamento de policía a los 56 años. Y mucho menos cuando esa persona ha sido un cartero toda su vida. Tal vez podría comprender todo esto un poquito más, si este pobre señor asesinado se hubiera jubilado como miembro de un grupo elite de las fuerzas armadas, como los Boinas Verdes, los Rangers, o los Navy Seals, si hubiera sido un Rambo. Pero, no. Era un empleado del servicio postal antes de ingresar a la policía casi a los sesenta años.

Yo no entiendo como es que la Policía de Broward puso a un anciano de 76 años a custodiar,  él sólo, a un tipo con el físico de Mike Tyson en su apogeo y con múltiples delitos de violencia a  su haber. Un tipo que está cumpliendo cadena perpetua, que no tiene nada que perder. No me cabe en la cabeza como es que, a estas alturas, el Jefe de Policía de Broward no sabe si el asesino había sido esposado.

Tengo una enorme confusión. El Jefe de Policía de Broward dijo ayer que no se puede discriminar a una persona por su edad y que el policía asesinado estaba en muy buenas condiciones físicas. Yo me pregunto: ¿Constituye discriminación que las aerolíneas obliguen a los pilotos a retirarse a cierta edad? Yo no sé ustedes, pero yo no abordo un avión a Europa o a California, con largas horas de vuelo, si me entero que el piloto tiene 76 años.  Sorry. Debe ser que discrimino a los ancianos.

A mi me enternece que una persona de 76 años quiera seguir trabajando. Si llego a esa edad, quisiera trabajar. Pero, si voy a dedicarme al transporte de gente, tal vez lo que haría es conducir uno de esos buses que llevan a ancianos a citas médicas. Tal vez me encontraría con algún anciano o anciana agresiva. Pero al menos no estaría en tanta desventaja como el policía asesinado. Por el amor de Dios, a ese pobre hombre no lo pusieron a transportar de la cárcel a un tribunal a alguien que se robó un canario de una tienda de animales o a una señora que se voló una luz roja de un semáforo. Lo pusieron a transportar a un monstruo furioso y fuerte que llevaba toda una vida cometiendo delitos de violencia.

Yo no sé en que va a parar todo esto. El asesino probablemente será ejecutado. Pero pienso que no es el único culpable. Si por mi fuera, ahora mismo sacaban al Jefe de la Policía de su puesto a patadas por el culo. Una vez más, perdonen mi vocabulario.

Yo lamento mucho la muerte de este pobre anciano policía. Siento alivio y sorpresa porque el asesino fue capturado. Alivio porque no pudo matar a más gente. Sorpresa porque dudo de la competencia de los departamentos de Policía del Condado Broward.

Y hablando de alivio y sorpresa.  Sentiría más alivio aún si hoy echan al Jefe de Policía de Broward, aunque no sea a patadas por el trasero. Pero eso sería una sorpresa. Me temo que lo van a dejar en el puesto.

Yo sintonicé algunos noticieros de la televisión en español del sur de la Florida ayer. Cubrieron, por supuesto, la noticia del policía asesinado. Pero, a no ser que me haya perdido algo, no escuché nada de lo extraño que es que pongan a un policía de 76 años –sólo- a cuidar a un preso peligroso joven, fuerte y violento y que no se pueda determinar  si el reo estaba esposado.

Siento una enorme confusión. A mi me queda mucho tiempo, mucho, para llegar a la edad del desdichado policía asesinado. Pero debe ser que estoy poniéndome viejo. No entiendo. ¿Un policía de 76 años custodiando a un reo peligroso? ¿Reporteros que no les pica la curiosidad más allá de reportar que ha caído otro defensor del orden público?

Sí. Me estoy poniendo viejo. Pero la verdad es que no entiendo un carajo.

8 de noviembre de 2008