No Drama Obama. 30 de mayo/10

El derrame en el Golfo de México es devastador para la ecología y la economía. Lo es también políticamente para el Presidente Obama.

El Presidente no ha sabido manejar bien el desastre. La imagen que ha proyectado es de distanciamiento, de frialdad. No Drama Obama at his best. Or worst.

Le ha pasado como a George W. Bush cuando el Huracán Katrina. Era agosto del 2005. Fue uno de los peores meses, quizás el peor, de la guerra en Irak. Cada día morían más militares estadounidenses. Mientras tanto, Katrina cobraba fuerza monstruosa en el Golfo de México y apuntaba hacia New Orleans. Y todos los días veíamos imágenes de Bush en su rancho en Texas cortando leña, montando bicicleta con Lance Armstrong, viajando a un campo de golf para golpear algunas pelotas. Proyectaba una imagen de desdén, de total indiferencia que perjudicó mucho su perfil político y marcó el resto de su presidencia.

A Obama le pasa lo mismo. Ha hecho dos viajes a Luisiana. Ha caminado por la arena de una playa contaminada por el derrame.  Pero no parece  sincero. No parece estar al mando.

Por otra parte, ¿qué es eso de pasar el fin de semana de Memorial Day en Chicago? En tiempos de guerra, el Comandante en Jefe tiene que quedarse en Washington y encabezar la ceremonia en el Cementerio Nacional de Arlington.