Vuelvo a la calle (28 de junio /09)

A veces extraño ser un reportero local de la calle. Me encanta esa frase, de la calle. No sé si verdaderamente se debe decir así en español. Viene de “street reporter,” que es lo que fui hace mil años en una ciudad bien lejos de donde vivo ahora y cuyo nombre no viene al caso en este momento.

Me encantaba reportar sobre la política local. Había unos personajes muy pintorescos en la política local de aquella ciudad. Y cuando digo pintorescos, no lo hago de manera despectiva. Yo le tenía cierto cariño a aquella gente de la política local donde vivía. Era gente bastante más auténtica que los políticos que luego conocí nacional e internacionalmente. Quizá es que, a medida que van escalando peldaños, los políticos se vuelven más hipócritas, ambiciosos y antipáticos.

Pero, bueno, sea como fuere  es verdad que uno con el tiempo siente nostalgia por el lejano pasado y trata de regresar a sus raíces. Y eso es lo que he decidido hacer.  Cuando se me presente la oportunidad, voy a reportar sobre la política local donde vivo ahora, que es Miami. Pero no voy a hacer como lo hacía cuando comencé en este oficio. Ha cambiado mucho el periodismo desde entonces. Es más, yo creo que está moribundo el periodismo. Ahora todos somos periodistas. Son periodistas los heroicos iraníes que rompen la censura y a través de Twitter, Facebook y YouTube denuncian lo que ocurre en su país. Y son periodistas también un bando de brutos que apenas saben leer y escribir pero a quienes  por amistad, piedad o sabrá Dios que otra cosa, alguien les da una oportunidad para trabajar como reporteros en algún medio.

Si señor, cambió el periodismo y cambié yo también. Estas cosas las voy a escribir para un blog y para Facebook y voy a violar casi todos los parámetros que existían cuando yo comencé a trabajar.

Ya no tengo editores que me  asignen nada ni que me manden a sacar esto o poner aquello. Este periodismo nuevo que haré será un reflejo de mi desajustada personalidad, desorganización mental y eternas ganas de joder. Es una nueva suerte de “gonzo journalism. Mi primera crónica será sobre la política miamense. Ya viene pronto.